Sin pensar: multipliquemos por dos los numeritos de Juan Rivera en esta temporada, y tendremos su rendimiento en 158 juegos -- una campaña completa. ¿Qué tenemos de resultado? 94 anotadas, 36 dobles, 38 jonrones, 122 remolcadas y una marca de .299/.349/.566 (.915 de OPS)

Impresionante, ¿no? Claro que lo es...todos esperábamos que Rivera tuviera un buen año en algún momento, pero no creo que mucha gente haya previsto que se convirtiera en este monstruo ofensivo

Hace un mes escribía esto sobre él: "Si Rivera logra mantenerse sano y saludable durante la segunda mitad, pudiera fácilmente estar rivalizando gran parte de sus marcas personales". Y sin embargo, me quedé corto, porque también comenté que "pudiera llegar a conectar hasta 20 jonrones y remolcar 75 carreras, a la vez que anotaría 50 por primera vez en su carrera. Su promedio de bateo, OPS, slugging y OPS estarían al mismo nivel que lo alcanzado en el 2004 cuando jugaba con los extintos Expos de Montréal"

La verdad es que inmediatamente después de que yo escribiera eso, Rivera explotó y ha bateado para .327 desde entonces, incluyendo 11 de sus 19 cuadrangulares (¡1 cada 10 turnos!), remolcando 28 carreras en igual número de encuentros

Ciertamente, es difícil creer que vaya a mantener ese ritmo (de hecho, en lo que va de agosto "solamente" batea para .296/.323/.519), pero en cualquier caso, este despertar pudiera ser una señal de muchas cosas buenas por venir para el criollo

Ahora, ya que destaco lo bueno, tengo que hacer lo mismo con lo malo, que en este caso está representado por un par de señales que indican que este desempeño puede ser efímero. En primer lugar, Rivera está jugando su temporada de 27 años (aunque cumplió los 28 hace un mes), esto nos dice que tiene cierto sentido esperar que su rendimiento mejore, ya que está en la "mejor" edad de un bateador, y también nos dice que pudiéramos esperar unos números similares en las próximas dos o tres campañas. ¿Por qué digo que esto es malo? Bien, quizás "malo" no sea la palabra adecuada, pero lo que quiero expresar es que si esta mejora se debe solo a la normal progresión como pelotero, entonces estaríamos viendo el tope de Rivera, lo máximo a lo que puede llegar, y que de ahora en adelante (saltando las dos o tres temporadas que menciono arriba) sus números vendrán en descenso

En segundo lugar, Rivera apenas ha logrado 20 boletos en 312 viajes al plato (uno por cada 15.6 visitas al home), lo que nos indica que más que ser paciente, está "corriendo la ola" y aprovechando un buen momento de contacto y algo de suerte, cosa que se le puede terminar de un momento a otro. Ojo, no estoy diciendo que Rivera no sea capaz de mantener estos numeritos, sino que no estaría de más que potenciara un poco la obtención de bases por bolas, para que su OBP no sea tan dependiente de su promedio de bateo. De hecho, su BABIP de .293 nos dice que su promedio de bateo debería de bajar levemente en el futuro inmediato, por lo que sería conveniente sumar uno que otro boleto por ahí para compensar

En cualquier caso, ya Rivera superó un par de sus marcas personales -- las de jonrones y remolcadas -- y está a punto de dejar atrás otras. Y si llegara a terminar la temporada con un OPS por encima de .900, pudiera estar cementando su lugar como una de las piezas más importantes de la ofensiva de los Angelinos en los próximos dos o tres años...

Al paso que va, puede terminar el año con 30 vuelacercas y cerca de 100 remolcadas, a pesar de haber perdido más de 20 encuentros por las lesiones. Nada despreciable...nada despreciable...