30.6.05
De flies, rollings y Carlos Silva
Anteayer estuve viendo los primeros innings del juego que lanzara Carlos Silva frente a los Reales de Kansas City. Lamentablemente, el criollo recibió una fuerte respuesta de los bateadores contrarios, quienes le anotaron seis carreras, todas limpias, en apenas cinco entradas.
Silva, como es su costumbre, permitió más hits que lanzó innings. En total, 10 bateadores de Kansas City lograron conectar incogibles, incluyendo un cuadrangular de Shane Costa.
En el partido, transmitido por Meridiano TV, el conocido Dámaso Blanco comentaba que a Silva le conectan más rollings que flies, haciendo ver que esto era algo bueno.
Blanco tiene cierta razón cuando dice esto. Se suele preferir que un lanzador haga que los contrarios bateen por el suelo más que por el aire, ya que así reduce la posibilidad de que le conecten extrabases, y en consecuencia, cuadrangulares. Pero esto también tiene un lado negativo, y es que para que esto sea una ventaja, el infield tiene que ser muy bueno, porque de lo contrario, solo se le estarán dando más oportunidades para que cometan errores.
Revisando un poco la carrera de Silva, sus números indican que ciertamente es un pitcher 'rastrero'. Hasta su última salida le habían bateado 852 rollings y 478 flies, una proporción R/F de 1.78. De hecho, este número es bastante elevado. Lo que me llamó la atención, sin embargo, es que esa tasa parece estar cambiando a medida que pasan los años:
* Los números del 2005 son hasta el 28.06.05
Esta tendencia es preocupante. Dado que a Silva le conectan tantos hits (10.52 H/9 en su carrera), si la mitad de esos fueran por el aire, la probabilidad de que le comiencen a dar más jonrones aumentaría también -- y a mayor cantidad de jonrones (con hombres en base por los otros hits que le han dado), más carreras permitidas -- y a mayor cantidad de carreras permitidas, más juegos perdidos. De hecho, el 12% de los flies que le dan a Silva son jonrones, y casi el 40% de las carreras que permite son causadas por batazos de vuelta entera. Ciertamente, no es alentador.
Pero estas son solo conjeturas. De hecho, el comportamiento de Silva ha sido todo lo contrario a lo que mi lógica explica. Su efectividad ha venido en descenso cada año.
Retomando el punto de la necesidad de tener un buen infield, si Silva logra mantener su tasa de R/F por encima de 1.5, los jugadores del cuadro de los Mellizos de Minnesota deberán 'ponerse las pilas' para fildear la gran cantidad de batazos que van a ver cada vez que el criollo esté en la lomita.
Revisando sus numeritos de fildeo, se ve que la situación no es del todo alentadora. Si bien los promedios de fildeo de los jugadores de primera, segunda y el campocorto, son relativamente buenos (.991, .995 y .981, respectivamente), cada vez que a Silva le den un batazo por tercera base, habrá que cerrar los ojos y ponerse a rezar: los antesalistas del equipo promedian apenas .917 -- preocupantemente, Mark Cuddyer, el titular de la posición, tiene una marca de .922. Simplemente horrorosa.
En el caso de los zone ratings no hay mucha diferencia, aunque parecieran indicar que la situación con los shortstops no es tampoco nada que amerite celebración. Los inicialistas fildean el 84.9% de las pelotas bateadas hacia su zona, y los intermedistas hacen lo propio con el 86.1%, números nada malos. Sin embargo, los campocortos solo han fildeado el 81.6% de las posibles jugadas, y los tercera bases un triste 76.6% -- la antesala es, típicamente, la posición donde se fildea el menor número de batazos conectados en su dirección. Estos números no son los peores de la liga (ciertamente no son tan malos como los de los Tigres de Detroit), pero no pintan un buen panorama.
Si yo fuera Ron Gardenhire, me preocuparía un poco con esta situación -- la suma de un lanzador que permite muchos rollings (y cuando digo muchos, quiero decir MUCHISIMOS), con un infield que no es de lo mejorcito de la liga, puede dar un resultado nefasto si la suerte no está de su lado.
Pero de nuevo, estas son solo suposiciones, y no creo que Gardenhire esté perdiendo mucho sueño la noche antes de que lance Silva, quien, a final de cuentas, tiene marca de 6 y 3, con efectividad de 3.55, y apenas 5 boletos permitidos (aunque su K/9 de 2.84 es, de lejos, la más baja en las Grandes Ligas para lanzadores con más de 100 entradas lanzadas).
...aunque, ¿quién sabe qué va a pasar en el futuro si Silva continua permitiendo tantos imparables y si cada vez más de ellos son flies?
Estadísticas cortesía de Béisbol Report y ESPN.com
Silva, como es su costumbre, permitió más hits que lanzó innings. En total, 10 bateadores de Kansas City lograron conectar incogibles, incluyendo un cuadrangular de Shane Costa.
En el partido, transmitido por Meridiano TV, el conocido Dámaso Blanco comentaba que a Silva le conectan más rollings que flies, haciendo ver que esto era algo bueno.
Blanco tiene cierta razón cuando dice esto. Se suele preferir que un lanzador haga que los contrarios bateen por el suelo más que por el aire, ya que así reduce la posibilidad de que le conecten extrabases, y en consecuencia, cuadrangulares. Pero esto también tiene un lado negativo, y es que para que esto sea una ventaja, el infield tiene que ser muy bueno, porque de lo contrario, solo se le estarán dando más oportunidades para que cometan errores.
Revisando un poco la carrera de Silva, sus números indican que ciertamente es un pitcher 'rastrero'. Hasta su última salida le habían bateado 852 rollings y 478 flies, una proporción R/F de 1.78. De hecho, este número es bastante elevado. Lo que me llamó la atención, sin embargo, es que esa tasa parece estar cambiando a medida que pasan los años:
AÑO | R | F | R/F |
2002 | 152 | 54 | 2.81 |
2003 | 148 | 81 | 1.83 |
2004 | 369 | 234 | 1.58 |
2005 | 183 | 109 | 1.68 |
Esta tendencia es preocupante. Dado que a Silva le conectan tantos hits (10.52 H/9 en su carrera), si la mitad de esos fueran por el aire, la probabilidad de que le comiencen a dar más jonrones aumentaría también -- y a mayor cantidad de jonrones (con hombres en base por los otros hits que le han dado), más carreras permitidas -- y a mayor cantidad de carreras permitidas, más juegos perdidos. De hecho, el 12% de los flies que le dan a Silva son jonrones, y casi el 40% de las carreras que permite son causadas por batazos de vuelta entera. Ciertamente, no es alentador.
Pero estas son solo conjeturas. De hecho, el comportamiento de Silva ha sido todo lo contrario a lo que mi lógica explica. Su efectividad ha venido en descenso cada año.
Retomando el punto de la necesidad de tener un buen infield, si Silva logra mantener su tasa de R/F por encima de 1.5, los jugadores del cuadro de los Mellizos de Minnesota deberán 'ponerse las pilas' para fildear la gran cantidad de batazos que van a ver cada vez que el criollo esté en la lomita.
Revisando sus numeritos de fildeo, se ve que la situación no es del todo alentadora. Si bien los promedios de fildeo de los jugadores de primera, segunda y el campocorto, son relativamente buenos (.991, .995 y .981, respectivamente), cada vez que a Silva le den un batazo por tercera base, habrá que cerrar los ojos y ponerse a rezar: los antesalistas del equipo promedian apenas .917 -- preocupantemente, Mark Cuddyer, el titular de la posición, tiene una marca de .922. Simplemente horrorosa.
En el caso de los zone ratings no hay mucha diferencia, aunque parecieran indicar que la situación con los shortstops no es tampoco nada que amerite celebración. Los inicialistas fildean el 84.9% de las pelotas bateadas hacia su zona, y los intermedistas hacen lo propio con el 86.1%, números nada malos. Sin embargo, los campocortos solo han fildeado el 81.6% de las posibles jugadas, y los tercera bases un triste 76.6% -- la antesala es, típicamente, la posición donde se fildea el menor número de batazos conectados en su dirección. Estos números no son los peores de la liga (ciertamente no son tan malos como los de los Tigres de Detroit), pero no pintan un buen panorama.
Si yo fuera Ron Gardenhire, me preocuparía un poco con esta situación -- la suma de un lanzador que permite muchos rollings (y cuando digo muchos, quiero decir MUCHISIMOS), con un infield que no es de lo mejorcito de la liga, puede dar un resultado nefasto si la suerte no está de su lado.
Pero de nuevo, estas son solo suposiciones, y no creo que Gardenhire esté perdiendo mucho sueño la noche antes de que lance Silva, quien, a final de cuentas, tiene marca de 6 y 3, con efectividad de 3.55, y apenas 5 boletos permitidos (aunque su K/9 de 2.84 es, de lejos, la más baja en las Grandes Ligas para lanzadores con más de 100 entradas lanzadas).
...aunque, ¿quién sabe qué va a pasar en el futuro si Silva continua permitiendo tantos imparables y si cada vez más de ellos son flies?
comentarios:
Regresa a la página anterior...
Recuerda que además de Silva, casi todos los lanzadores de los Twins entran en la filosofía de casa, es decir, dejar que la gente batee, siempre que sean rollings. Si es malo para Silva, también es malo para los demás abridores y, por ende, para todo el equipo.
Julio, fuiste el comentario #300...
Estoy de acuerdo contigo en tu comentario sobre la filosofía de la casa.
Estoy de acuerdo contigo en tu comentario sobre la filosofía de la casa.
Uno de los puntos a favor de Silva es que si bien permite muchos hits tambien es cierto que la relacion de extrabases entre esos hits es bastante baja (yo explique esto en un post en Beisbol Report, creo) y no da bases por bolas. Eso quiere decir que sus oponentes tienen que ir practicamente de 1 en 1 para anotarle carreras. Sin embargo el problema del rango del infield y lo que le cuesta a un staff con esas caracteristicas se contabiliza en uno o dos hits adicionales por juego y posiblemente una o dos carreras semanales. Menos mas que ese staff no embasan bateadores regularmente con bases por bolas.
Publicar un comentario
Regresa a la página anterior...