La temporada de Aníbal Sánchez es una que merece estudio. Todo el mundo se fija en el no hit no run -- cosa lógica, porque es un hecho memorable -- pero poca gente detallaba el resto de la temporada de este joven antes de que ocurriera ese evento

Como novato, Sánchez tuvo una de las mejores campañas en lo que va de década, que además de incluir ese no-hitter, también tuvo un EFEC+ de 152 -- nada malo (en comparación, Johan Santana tuvo 161, Carlos Zambrano tuvo 136 y Freddy García tuvo...103)

JG	JP	JL	JC	BL	IP	H	BB	SO	EFEC	EFEC+	WHIP	Kp9	BB/K
10	3	18	2	1	114.1	90	46	72	2.83	152	1.19	5.67	1.57

Ahora, como con todos los novatos -- y particularmente los lanzadores -- hay que tener paciencia. Mucha gente me escribe o deja comentarios preguntando qué hará Sánchez en el futuro, a dónde llegará. Esto es muy difícil de saberlo todavía

Y es aquí donde me pongo pesimista y antipático: el que haya lanzado un no hit no run no quiere decir absolutamente nada. De hecho, de los otros 16 novatos en lanzar un no-hitter, apenas 6 de ellos llegaron a ganar más de 100 juegos en las Mayores (incluido su compatriota Wilson Alvarez, quien se retiró con 102), y solo uno, Vida Blue, alcanzó los 200. El promedio de victorias de ese grupo (sin contar a Sánchez) es de apenas .517

Ojo, esto no quiere decir que el criollo va a ser un lanzador mediocre o que se comportará igual que ese grupo, pero nos aclara que no por haber lanzado esa gema tiene asegurada una carrera especial o singular

¿Qué tiene que mejorar Sánchez para mantenerse efectivo? Lo primero y más obvio es su control. No es tan malo como el de los Zambranos, pero con 46 boletos en apenas 114.1 entradas, tenemos que por cada 9 innings lanzados regala casi 4 bases por bolas -- esos son 4 corredores "gratis" que tiene por juego

Su tasa de ponches es aceptable, pero no es sensacional (5.67). Habrá que ver cómo la mantiene en el 2007 para tener una mejor idea de qué le deparará el futuro: está demostrado que como norma, los pitchers con elevadas tasas de ponche suelen tener mejores y más largas carreras

Por otro lado, su FIP (su porcentaje o efectividad de pitcheo independiente del fildeo) fue de 4.27 -- 1.43 puntos más altos que su efectividad. En líneas generales, cuando un FIP es más alto que una efectividad, este es un bueno indicativo de que para la temporada siguiente la cantidad de carreras permitidas por nueve innings de ese lanzador tenderá a subir (igual pasa con el caso contrario, cuando el FIP es más bajo que la efectividad)

Pero allí solo les dije las cosas que debe mejorar o las que nos dicen que puede empeorar su marca. Debo también comentar las cosas que hizo bien: aunque el 55% de los batazos que le dieron fueron flies (eso debe bajarlo), apenas 7.7% de ellos terminó como jonrón, y adicionalmente, el porcentaje de corredores dejados en base es de 79.3% -- aunque suene raro, ese indicador es mejor cuando es más alto, porque eso quiere decir que los que se embasaron no anotaron

En resumen, Sánchez tiene potencial para convertirse en un buen lanzador, con algunos elementos que tiene que mejorar y otros que tiene que trabajar para mantener. Al igual que con Félix Hernández, será un placer poder ver hasta dónde llega su carrera...