Ya comenzaron a nombrar a los jugadores más valiosos de los diferentes equipos, y hasta la fecha dos de ellos han resultado ser Venezolanos.

En el caso de los Marlins de Florida, no hubo dudas al elegir a Miguelito Cabrera, quien con apenas 21 años de edad, casi lleva al equipo a otra post-temporada. Su marca de 33 cuadrangulares, 101 anotadas y 112 empujadas, lo hicieron merecedor de la distinción.

Al día siguiente fue nombrado también Bob Abreu, quien nuevamente lideró a los Phillies de Philadelphia en varios departamentos ofensivos, a la vez que los guiaba con su presencia en el dugout. Abreu terminó por segunda vez con 30-30, y también fue el nominado por su divisa para el Premio Roberto Clemente, que se otorga anualmente al pelotero con mayores cualidades humanísticas del año.

Y aunque aún no los han nombrado oficialmente, no sería para nada sorpresivo que tanto Johan Santana, con los Mellizos de Minnesota, y Víctor Martínez, con los Indios de Cleveland, sean dignos de una mención similar por sus equipos.

De no ser por Móises Alou y Aramis Ramírez, sería casi seguro que Carlos Zambrano fuera nombrado el más valioso de los Cachorros de Chicago. Y si no se hubiera lesionado, el premio de los Tigres de Detroit, que casi seguro se lo darán a Iván Rodríguez, quedaría en manos de Carlos Guillén.

Sin duda que este fue un año bárbaro para los peloteros criollos...