Durante toda la temporada, los Cardenales de St. Louis mostraron la mejor combinación de bateo y pitcheo de las Grandes Ligas, cerrando el año con tres lanzadores con más de 16 victorias, y uno de los dos candidatos con más chance de llevarse el Cy Young, y con un bateador que seguramente peleará el premio al Más Valioso luego de volver a conectar 40 cuadrangulares, promediar .330 y tener un OPS de 1.039.

Pero esto no quiere decir que los Pájaros Rojos no tengan nada de que preocuparse. Los Astros de Houston vienen de eliminar a los Bravos de Atlanta (otra vez), y siguen contando con el mejor 1-2-3 de lanzadores de la Nacional: Roger Clemens, legendario ganador de 300 partidos, con más de 4.500 ponches y 7 Cy Youngs, y que viene de liderar la liga en efectividad; Roy Oswalt: el menospreciado caballo de la rotación, que viene de ganar 20 partidos por segunda campaña consecutiva; y Andy Pettitte, quien demostró este año por qué la directiva de Houston tenía interés en contratarlo, terminando con la mejor segunda mitad de la campaña pasada. Y los bates de los Astros tampoco son nada para burlarse...

¿Quién debe ganar entonces? El favoritismo sigue estando del lado de los Cardenales, ya que terminaron con mejor marca en la temporada -- y únicos con 100 partidos -- y quedaron por encima de los propios Astros en la División Central (a 11 juegos, para ser exactos). La serie particular quedó 11-5 a favor de los de Missouri, quienes tienen básicamente el mismo equipo con el que llegaron a la Serie Mundial el año pasado (con mejor pitcheo, pero si Scott Rolen y con Larry Walker y Reggie Sanders disminuidos).

No creo que Houston le pueda ganar a St. Louis, aunque tampoco veo que la cosa sea por una sola via: St. Louis en cinco (peleados).

Estadísticas e imágenes cortesía de Béisbol Report